«Exceso de oferta, precios a la baja y caída de la ocupación han castigado un sector aún emergente pero clave para el reequilibrio territorial. El turismo rural, una aventura que comenzó hace apenas un cuarto de siglo, se enfrenta a un cambio de ciclo como consecuencia de la crisis económica que ha contraído la demanda doméstica mientras al mismo tiempo se ha disparado la oferta, tanto la reglada como la ilegal. Surgen además tres retos ineludibles: la comercialización online, la internacionalización y la reordenación de categorías.»…